lunes, 7 de octubre de 2013

Polémica en Pamplona: peatones y ciclistas

Casi no hay semana en que no venga en cartas al director algún escrito de peatones clamando contra los ciclistas que usan las aceras para desplazarse. En pocos años, y debido en gran parte al impulso dado por los Ayuntamientos, se ha pasado de un uso testimonial a uno intensivo de la bicicleta en la ciudad. Esa respuesta masiva de los ciudadanos ha cogido por sorpresa a los Ayuntamientos, que ahora no saben cómo digerir ese incremento de circulación, pues las normas y espacios de circulación no se han previsto. Les ha cogido el toro. Dicen que tenemos (y me lo creo) cientos de kilómetros de carril bici, pero están la mayoría en la periferia, y cuando alguno de ellos llega al centro, ahí viene el desmadre pues sólo es posible circular por las aceras, con el consiguiente enfado del personal. Hace unos días me tomé la molestia de hacer un inventario de todas las calles del primero y segundo ensanche, que (aparte del casco antiguo) es donde está el mayor problema para la circulación de las bicicletas. Me salen un total de 30 calles, que si restamos 4 que están peatonalizadas, quedan 26 donde se circula. Pues bien, de esas 26, en 23 se aparca en batería en alguno de los lados y en 3 se aparca sólo en línea. Además las calles en las que se circula en 2 vías son 10 y en una sola vía 16, lo que nos da el total de las 26 citadas calles. Bueno pues, con estos datos, que pueden tener algún error, pues hice el inventario en un par de horas, me atrevería a proponer a nuestro Ayuntamiento una solución rápida y económica para evitar que nos enfrentemos peatones y ciclistas que es lo que actualmente se está fomentando al no dar soluciones. La propuesta sería eliminar los aparcamientos en batería y convertirlos en aparcamientos en línea. Con el espacio que se gana da para poner un carril bici. Esto no es descubrir América, pues el Ayuntamiento hace tiempo que lo hizo en la calle Abejeras y Fuente del Hierro como mínimo. El aparcamiento en batería es más peligroso que en línea, pues al salir no se ve si vienen vehículos, además, muchas veces la longitud del coche o furgoneta es tal que invade e invalida la circulación por una vía. Baste con ir por Amaya o P. Caballero par ver que de las dos vías, una está inutilizada por los que salen demasiado o por los que aparcan “un minuto pues total hay otra vía para circular…” La estructura de las calles sería, de derecha a izquierda: acera, carril bici, aparcamiento en línea, vías de circulación (1 ó 2), aparcamiento en línea y acera. El carril bici estaría siempre a la derecha y la separación de este con la zona de aparcamiento en línea se resolvería con unos separadores de plástico atornillados al suelo y con una altura tal que impidiesen que al abrir la puerta derecha de los coches se invadiese el carril bici, evitando los accidentes por ese motivo. En las cuatro calles peatonales que existen en la actualidad, es cuestión de coger unos cubos de pintura y delimitar claramente el carril bici (darse una vuelta por San Sebastián si ir más lejos). Al que usa la bicicleta no le hace gracia ir por aceras ni por calles peatonales en las que no se señale el carril bici, con el riesgo de ser increpado por peatones (lo que sucede con bastante frecuencia). Cada vez vemos a más mujeres y hombres de todas las edades que usan ese medio y no son unos locos que ponen en peligro a los peatones. Los que hacen eso suelen ser el tipo de gente que va en moto sin tubo de escape o llevan el coche con una música a toda máquina, etc., por tanto la excepción. Con esta solución quitamos, evidentemente, plazas de aparcamiento, pero todo no se puede tener y hay que saber si lo que queremos es tener calles que son meros almacenes de coches o tener una ciudad equilibrada en cuando a movilidad. Las ciudades en un comienzo estaban diseñadas para los peatones y carros. Poco a poco el automóvil se ha adueñado de las mismas, pretendemos llegar hasta la puerta con el coche y si no subimos hasta el piso es porque no cabe en el ascensor. Mi experiencia profesional me ha enseñado que normalmente para solucionar los grandes problemas hay que hacer las cosas al revés de como se están haciendo. Si quieres descongestionar las carreteras hay que quitar camiones de las mismas (favorecer el transporte por ferrocarril) y no construir nuevas o ampliar las existentes. Si quieres descongestionar las ciudades debes prohibir o limitar el acceso de vehículos y no ampliar los accesos y construir parkings de rotación, pues es la pescadilla que se muerde la cola. Si hay sitio voy con el coche, y como vienen muchos coches hago más carreteras y aparcamientos… y así hasta el infinito. Además tenemos ejemplos de cómo se mueven los coches en función de las normas de aparcamiento. Por ejemplo ahora que se ha puesto zona azul en San Juan, hay sitio para aparcar que da gusto. Me pregunto, ¿dónde habrán dejado los coches los que los tenían aparcados hasta antes de esa norma?. Pues lo habrán dejado más lejos o no lo sacarán de casa y tomarán el transporte público. Otro ejemplo al contrario. Hace unos cinco años cuando se iba a hacer el parking de la calle Olite, sin anuncio previo, se quitó un carril en la calle Media Luna y se habilitó para aparcamiento en línea. Se empezó a pintar a las 8 de la mañana y para las 11 estaba todo ocupado. Y yo me preguntaba ¿dónde estaban ayer todos estos coches?, pues 100 o 200 metros más lejos. Claridad de ideas y celeridad en la toma de decisiones es lo que pediría a nuestras autoridades.

miércoles, 27 de marzo de 2013

El campo y la gran distribución

De vez en cuando aparecen en los medios de comunicación noticias sobre  la situación del campo. Que si la leche se  paga a unos precios que no cubren los costos de los ganaderos; que si los productores de frutas y verduras reciben unos precios irrisorios  si se compara con lo  que paga el consumidor final por ellos; que si los precios de los cereales  los fijan en Chicago….

Está claro que en todos estos casos los productores están a merced de las grandes industrias lácteas, de la gran distribución o de las cuatro multinacionales que controlan el mercado del grano a nivel mundial.

La solución al problema lácteo la veo difícil, ya que, el negocio de la leche transformada (básicamente yogur y derivados), que es donde  se gana dinero, está copado en España por dos o tres multinacionales francesas y por una suiza, a las que difícilmente se pueden desbancar. Así pues, mientras  las cosas no cambien, serán estas empresas las que marquen los precios de compra de la leche a los ganaderos.

Ni qué decir del oligopolio de los granos a nivel mundial que seguirá en manos de Cargill y compañia, por lo que el agricultor tendrá  que  estar “a lo que manden”.

Nos quedan las frutas y verduras, es decir los productos frescos, sin transformar. Estos se pueden vender  en el mercado nacional o en el extranjero. A nivel de exportación se conoce el potencial que tiene Almeria, pero yo al menos, desconozco qué es lo que se hace en Navarra, quién exporta y volumen de negocio.

Lo que pretendo aquí analizar son las ventas de productos frescos en el mercado nacional y que, en un gran porcentaje, llegan al  cliente final de la mano de las grandes cadenas de distribución, pues la venta directa no es significativa.

Estos productos cada vez tienen más peso en la cesta  de la compra, pues los precios son cada vez más  elevados y sin embargo el productor no está  satisfecho ya que sus márgenes son mínimos respecto a los que obtiene la gran distribución.

Creo que  los productores tienen  que  tratar de “puentear” a esa distribución y hacer la venta directamente.

Aquí es donde me atrevería a proponer una solución que, a mi modo de ver, permitiría al productor tener un beneficio justo y al consumidor pagar menos por el producto.

Se trataría de que los productores hiciesen sus ventas, vía Internet, directamente a los consumidores  finales, es decir: se saltasen a la gran  distribución.

Algunos productores de naranjas, pescados  y mariscos, “casheros” del País Vasco y de otras regiones, ganaderos de carne (sobre todo cerdo) ya lo están haciendo, pero al ser una oferta atomizada confieren al sistema tres importantes debilidades que limitan su desarrollo. Una: el cliente tiene que hacer el pedido a cuatro o cinco proveedores. Dos: al ser pedidos atomizados los proveedores exigen unas cantidades mínimas, para  hacer rentable el envío, que a menudo exceden la capacidad  de consumo de una familia. Tres: cada proveedor envía sus pedidos separadamente, con lo que el cliente tiene que estar en casa pendiente de cuándo le llegará la mercancía de cada uno de ellos.

Si las Cooperativas liderasen esta iniciativa y concentrasen la oferta de los productores, solucionaríamos  de golpe los tres puntos  débiles del actual sistema.

Uno: sólo habría que pedir a una o dos cooperativas. Dos: se podrían servir pedidos más pequeños  pues los envíos serían conjuntos  para todos  los clientes. Tres: evitaríamos los envíos a cada domicilio (rebajando costos de transporte), pues dichos pedidos serían depositados en locales   estratégicamente situados y con amplio horario de apertura, para que el cliente pasase a retirarlos a su comodidad, sin tener que estar  pendiente de los horarios de entrega.

Bueno pues, este sistema que propongo, hace unos días me enteré que los americanos lo llaman “capilaridad” y ya lo están poniendo en marcha en su país,  de lo cual me alegro, pues suele suceder que, en el nuestro, las novedades  se aceptan mejor  si ya están funcionando en el extranjero que si se nos ocurren a los de aquí, por aquello de “que experimenten otros”.

No se si lo propuesto puede servir para algo, pero lo que está claro es que los  agricultores  y ganaderos no pueden estar cruzados  de brazos pidiendo siempre soluciones al Gobierno. Tampoco tienen que esperar a que  se legisle sobre la mejora del funcionamiento de la cadena alimentaria: obligatoriedad de contratos  por escrito, código de buenas prácticas, tipificación de prácticas abusivas y control de incumplimientos con elevadas sanciones. Hay tales grupos de presión implicados que la posible legislación intentarán demorarla y limitarla en su beneficio.

Un planteamiento conjunto de UCAN, Sindicatos agrarios, y otros organismos implicados podría ser el germen de este proyecto. Todo menos quedarse parados.

 

Posibles mejoras del "puerta a puerta"

El proceso de recogida de basuras domésticas hace unos años era el siguiente. Los vecinos generaban la basura, la metían en unas bolsas sin hacer separación de ningún tipo de residuos y la dejaban a partir de una cierta hora en unos montones en la calle, donde, por la noche, era retirada por  camiones normales.

La visión no era muy agradable, pues esas bolsas a veces se rompían, rezumaban líquidos que manchaban el pavimento, ocasionaban malos olores, etc.

El siguiente paso fue instalar contenedores, con lo que se conseguía separar los residuos (orgánico, envases, papel y vidrio) y además permitía sacar la basura a cualquier hora. Por el contrario eso tenía un costo importante: instalación de contenedores e introducción de camiones  prensa que el sistema anterior no precisaba. También se instalaron en algunos lugares un tipo de contenedor que consistía en una especie de calcetín que estaba enterrado y que tenía una boca exterior en la que se depositaban las bolsas de basura. En ciertos puntos, por estética, se soterraron los contenedores actuales, pero es carísimo.

La basura que genera una familia es suya puesto que ella la produce y no se puede desprender de la misma cuando le viene bien y dejársela a la sociedad, o sea ponerla en la calle, con todos los problemas que ocasiona.

La solución “puerta a puerta” tiene cosas buenas (se saca la basura a partir  de una hora determinada, eliminando  los contenedores; se separa en cuatro tipos de residuos; se identifican los tipos de residuos por colores, etc.), pero también tiene cosas no solucionadas (exposición de cubos con basura colgados en postes; pensar qué días se tiene  que sacar cada tipo de basura; tener un lugar para ponerla cuando uno va a estar ausente y no pueda sacarla en  su día, etc,)

Los problemas hay que solucionarlos en origen, así que voy a permitirme brindar  unas ideas sobre  cómo veo el tema de recogida de basuras domésticas, por si fuese de utilidad  para alguien.

Entregaría a todas las viviendas, donde se implante el sistema, un contenedor con cuatro departamentos (rechazo, materia orgánica, papel cartón y envases) provisto de un sistema de pedal/prensa y un sencillo dispositivo para termosellado de las bolsas. Estas bolsas, entregadas por el servicio de basuras, serían biodegradables, de colores diferentes para cada residuo y con un código de barras de gran tamaño.

Se introduce cada residuo en su compartimento y seguidamente con la acción de un pedal se prensa para sacar el oxígeno (evitamos olores) y hacer que quepan más residuos. Cuando se ha llenado el mismo se termosella la bolsa.

Se sacan  a la calle a partir de la hora que se señale y se amontonan en los lugares establecidos. Esas bolsas termoselladas y con un grosor y características que las hiciesen prácticamente irrompibles, no generarían ni olores ni derrames que pudiesen ensuciar la calle. También se podrían amontonar correctamente pues, al estar prensadas, sería como poner un ladrillo sobre otro, con lo que el “montón” no sería tan antiestético. Además se podrían sacar todo tipo de bolsas cualquier  día de la semana.

Con este sistema se evitan los problemas que, desde mi punto de vista, tiene el sistema de recogida que plantean ahora.

Finalmente la recogida de esos “montones de basura” la realizarían camiones normales, pues como está ya compactada, no hace falta camión prensa, además al ir juntas bolsas con distinto tipo de residuos no procedería meterlas en el mismo camión prensa.

Al llegar al depósito de  basuras los camiones volcarían todo en una cinta transportadora de la que, al leer los códigos de barras que identifican cada tipo de bolsa, derivarían la misma para su posterior tratamiento.

Si el sistema funcionase, el siguiente paso sería que esas prensas fuesen un electrodoméstico más a instalar en las cocinas, haciendo de forma automática y más efectiva los procesos de prensado y termosellado.

En cuanto a la separación del papel en bolsas yo sería partidario de dejarlo como está, es decir que exista un contenedor para papel en la calle (que no plantea problemas higiénicos) dejando por tanto la separación de basuras en casa reducida a tres tipos, con lo que reducimos las medidas de ese  contenedor.

Como idea final y complementaria a lo anterior hay un tema de residuos (pilas y aceites usados) que su recuperación se hace incómoda para el usuario (por tanto tira el aceite por la fregadera y las pilas vete a saber a dónde van). La recogida de pilas la haría colocando un pequeño recipiente adherido  a las papeleras de la ciudad y serían recogidas por el servicio de basuras que  vacía las mismas. En cuanto al aceite facilitaría un tipo de envase único para que  se vacíen los  aceites  domésticos y se dejen junto con el resto de la basura para que sean recogidos por los  camiones correspondientes.

Si esta idea  se llegase a aplicar, tanto los cubos manuales como el futuro electrodoméstico, podrían ser fabricados en la Barranca, que por su tradición industrial lo tendría fácil de realizar y representaría  un impulso para esa  zona. No podemos esperar que venga gente de fuera a darnos trabajo, lo tenemos que generar nosotros y quizá esto sería un ladrillo más a colocar en la reconstrucción de nuestra Comunidad.

viernes, 9 de noviembre de 2012

¡Jubilados al poder!


“Jubilados  al poder” (JALP) podría ser la denominación de un nuevo partido, como primer paso para regenerar el espectro  político actual.

No es cuestión aquí de definir los estatutos del mismo, pero el ideario principal podría reducirse a defender “POR ENCIMA DE TODO” la JUSTICIA SOCIAL, la ETICA/MORAL y el SENTIDO COMÚN, conceptos suficientemente amplios como para que, dentro de ese partido, tengan cabida una gran parte de los españoles.

Para ser miembro de JALP sólo se exigiría ser mayor de  65 años. Cualquier miembro de JALP podría presentarse como candidato a cualquier elección, sin más que presentar su curriculum del que se deduzca que, por su vida laboral anterior, esté capacitado para ocupar el puesto al que opta. Los afiliados votarían sobre esas listas a sus candidatos  preferidos. Es lo que llamaríamos “primarias” y que  pocos partidos practican, pues las listas las impone “el aparato del partido”.

Otras características de JALP podrían ser: Nutrirse de las cuotas de sus afiliados, renunciando a cualquier financiación Estatal o de otro tipo. Asimismo se huiría de la burocracia y de los excesivos gastos de funcionamiento, realizando el máximo posible de su actividad a través de Internet y limitando la estructura administrativa asalariada, procurando la ayuda desinteresada de los propios afiliados.

Bueno pues, ya tenemos un nuevo partido, unos candidatos con capacidad demostrada elegidos por los afiliados y un partido austero que renuncia a cualquier tipo de subvención para así ser libre.

Bueno, y ¿por qué  va a haber ciudadanos (sean o no jubilados) que voten a JALP? ¿Qué  puede ofrecer  JALP de nuevo respecto a los partidos tradicionales?.

Se me ocurren varias  razones:

 

1.   Contra lo que pueda parecer, JALP sería el partido del futuro. Los jubilados lo que pretenden principalmente es poder seguir cobrando sus pensiones y tener una asistencia digna cuando la precisen (ley de dependencia). El jubilado ya ha terminado su vida laboral y mejor o peor ya tiene su futuro decidido. Su verdadero problema, es  el futuro de sus hijos (que con demasiada frecuencia los tiene parados y a su cargo) y de sus nietos. Por tanto, una posible victoria de JALP, no implicaría que iban a tratar de aumentar sus pensiones a costa de lo que fuese, sino que tratarían de crear un país justo, solidario y con un futuro ilusionante. Por el contrario los partidos actuales ya sabemos lo que dan de sí y suelen trabajar a corto plazo pues parece que sólo  persiguen perpetuarse en el poder.

2.   JALP podría disponer de los mejores profesionales. Hay cantidad de personas de todo tipo (directivos, ingenieros, economistas, médicos, científicos, catedráticos….) que se jubilan a los 65 años y que pueden aportar a la sociedad su experiencia sin pedir casi nada a cambio. Antes era imposible atraerlos a la política pues en muchos casos sus remuneraciones en la empresa privada podían ser muy superiores a la pública; ahora eso pasaría a ser secundario. Es como la persona que al jubilarse se dedica a colaborar con una ONG.

3.   JALP no sería un partido de “viejillos”, sino de personas competentes y con gran experiencia. Para correr los 100 metros necesitamos un atleta de 20 años. Para dirigir un País lo que se precisa es capacidad, honradez y experiencia. Muchas personas de 65 años o más presiden Gobiernos, grandes multinacionales, etc., por algo será. Estos políticos seniors serían los que, junto a funcionarios de todas las edades, harían un tandem perfecto de cara a adoptar criterios de gestión acordes con los nuevos tiempos. A veces se tiene a gala el que un Ministro tenga treinta años y sea el número 1 de su promoción. JALP querría a esa persona  pero 40 años más tarde, cuando haya trabajado, creado una familia, educado hijos, sufrido los golpes que da la vida, haya visto morir a sus  padres…. En definitiva se haya  formado no sólo técnica sino humanamente, con lo que sus criterios serán serenos y comedidos. No podemos desperdiciar la aportación que  pueden hacer esas  personas al País.

4.   Por otra parte, al entrar en política con esa edad, hará que no se produzca el síndrome de la “puerta giratoria” del que habla Krugman. Altos funcionarios  que piden excedencia y pasan  a la empresa privada, vuelven a la política, salen de nuevo a la empresa privada y otra  vez vuelven a la política. Sigan la trayectoria de gobernantes que tenemos ahora y otros que  hemos tenido anteriormente para que vean que lo dicho anteriormente  es cierto.

5.   Hoy en día a los 65 se está en condiciones de poder asumir responsabilidades durante una legislatura, con lo que no se pueden perpetuar en la política, como ocurre ahora con demasiada frecuencia. Además al tener ya “solucionada la vida” se puede actuar  con entera libertad, cosa que  no ocurre con muchos políticos en la actualidad, pues su futuro está en mantenerse en la política al precio que sea.

6.   JALP no sería un partido revolucionario al que  temer, sino un partido sensato que  lo único que pretendería es defender el imperio del sentido común, sentido que no está presente en muchas de las decisiones  políticas que se toman en la actualidad.

Afiliarse a este partido sería el primer paso para responder a la pregunta que siempre tenemos en los labios ¿y qué podemos  hacer? con la respuesta ¡lo que vamos a hacer!

 

Unos datos marginales:

Actualmente los pensionistas en España rondan los 8.200.000. El Partido Popular ganó las  elecciones  de 2011 con 10.830.693 seguido del PSOE con 6.973.880 de votos.

En Navarra los pensionistas actualmente rondan los 123.000. UPN-PP obtuvo 126.101 votos y el PSOE 72.656 en las elecciones de 2011.

El que quiera que  saque  conclusiones…

Así que, desde la sensatez, podríamos llamar  a los ¡JUBILADOS AL PODER¡

 

viernes, 28 de septiembre de 2012

Cómo neutralizar la subida del IVA de los espectáculos

A raíz del incremento del IVA (del 8 al 21%) para cines, teatros, música, etc. los promotores y otros estamentos ligados al mundo de la cultura han puesto el grito en el cielo. Que si nos cargamos la cultura, que si tal o cual…

Realmente si protestan es porque, al tener que repercutir el incremento del IVA (se plantean si total o parcialmente) en el precio de las entradas, piensan que sus ventas van a descender considerablemente, y eso es lo que realmente les preocupa.

Sin embargo, hasta la fecha, la mayoría de esos promotores no han vacilado en poner en práctica algunas medidas por iniciativa propia (no por imperativo del Gobierno como en el caso del IVA) que perjudican a sus clientes, pero mientras estos paguen, parece no les preocupa.

Me refiero a la venta de entradas a través de Internet.

Hasta hace no muchos años el sistema para adquirir entradas para cualquier espectáculo era el de acudir a la taquilla, hacer la consiguiente cola y comprarlas.

Si el espectáculo era en otra ciudad tenías que ver si un conocido residente allí te las podía adquirir.

Después vinieron las reservas por teléfono que te obligaba a pasar por taquilla a retirarlas una hora antes. Más tarde ya se podían comprar las entradas llamando por teléfono y dando el número de la tarjeta de crédito para efectuar el pago.

En todos estos casos siempre se pagaba el valor facial de la entrada sin ningún tipo de gasto adicional.

Cuando llega Internet, los promotores introducen un intermediario en el sistema (una serie de empresas, la mayoría participadas por Cajas de Ahorro) para realizar dicha venta. Por ese servicio cobran un 8% de media (con unos mínimos) sobre el costo total de la entrada IVA incluido. Este sistema supone, hasta la fecha, un negocio redondo para los promotores de espectáculos, ya que, sin hacer ninguna inversión pueden vender más entradas a través de Internet, cobran el valor facial de la entrada y además la mayor parte de las veces reciben de las empresas vendedoras una parte de la comisión cobrada por estas.

Pongamos el ejemplo de un cine cuya entrada vale 6€ y más el 8% de IVA se pone en 6,48€ si la compras en taquilla y si es por Internet 7,20€ (pues la comisión media para entradas del cine es del 11%).

La misma entrada con el 21% de IVA saldría por 7,26€ en taquilla y 8,06€ por Internet.

Así pues, si continuásemos con el sistema actual tendríamos que pagar 0,86€ más por entrada adquirida por Internet como consecuencia del aumento del IVA. Sin embargo si se eliminasen los intermediarios y cada promotor vendiese directamente en su web las entradas al precio de taquilla, el incremento sólo sería de 0,06€ (diferencia entre 7,26-7,20). Queda claro que los que antes y ahora compraban en taquilla tendrían un incremento de 0,78€ que es lo que corresponde al aumento del 13% del IVA. Sin embargo los que antes y ahora compraban por Internet no se enterarían de la subida del IVA, y, en consecuencia, se supone seguirían acudiendo al cine con la misma asiduidad que anteriormente.

Lo sorprendente es que la venta de entradas en Internet funciona justo al revés que cualquier otro tipo de venta (libros, discos, viajes, informática, ropa…). Internet se caracteriza por, entre otras cosas, eliminar intermediarios para que el cliente final compre más barato. Sin embargo los que venden entradas de espectáculos en lugar de quitar un intermediario lo ponen, con lo que el que compra por Internet paga más que si va a la taquilla.

Es como si por hacer una transferencia bancaria por Internet desde tu casa, te cobran más comisión que si vas a la oficina del Banco para que te la realice un empleado.

Hoy en día y con lo que se ha avanzado, encuentro incomprensible que los promotores no tengan sus propias páginas web para la venta directa de sus entradas sin tener que pasar a través de un intermediario. Por otra parte, y teniendo en cuenta que la mayoría de los teatros y auditorios son de titularidad pública, sigo sorprendiéndome que no tengan una web única para todos y que sólo variaría en la distribución de las localidades de cada recinto. El coste que les pueda suponer el instalar estos sistemas sería mínimo al repartirlo ente todos los recintos y además lo recuperarían rápidamente por el incremento de las ventas por Internet, pues con las comisiones actuales mucha gente se lo piensa y acude a la tradicional “cola” de toda la vida, o sea, “retrocediendo en el tiempo”.

Creo que los promotores (públicos y privados) se tienen que replantear sus sistemas de gestión interna de cara a dar un mejor servicio con un menor coste a sus clientes. Realmente y aunque siempre se dice que la satisfacción del cliente es el objetivo de todas las empresas, con demasiada frecuencia lo pongo en duda. Lo primero que persigue la empresa es su beneficio directo y si “de paso” beneficia al cliente pues mejor, pero partir de lo que sea mejor para el cliente y luego ver cómo le repercute a la empresa no lo hace casi nadie. El cliente sólo se valora cuando se pierde.

Y ya, metido en harina, haré de paso otra referencia a la incongruencia de los sistemas de venta de entradas respecto a todo el comercio sea el clásico o por Internet.

Me refiero a las devoluciones de entradas que están prohibidas por todos los promotores. Compras una entrada y pase lo que pase ya no la puedes devolver. En cualquier otro tipo de transacción comercial eso no ocurre, pues todo se puede devolver, si bien se dan unos plazos, un porcentaje de penalización, etc. pero en el caso de una entrada para una ópera para dentro de dos meses, si entre tanto te surge algo por la que no la puedas utilizar, te la tienes que comer con patatas. Además ya no existe el recurso de ir a la taquilla como antaño para darle las entradas y vea si te las puede vender, pues lo tienen totalmente prohibido. Como se ve sigue siendo el cliente su principal preocupación….

Finalmente doy unos datos. El valor de las compras realizadas por Internet el 1º trimestre de 2012 han sido de 2.452,6 millones de €, y la venta de entradas para espectáculos ha supuesto el 4,1% del total, lo que nos da un monto de 100 millones de euros (más de 400 millones al año pues en este 1º trimestre han subido el 20% sobre el mismo período de 2011).

Pienso pues que los promotores de espectáculos tienen márgenes de mejora importantes en su gestión para trasladarlos al cliente.

jueves, 9 de agosto de 2012

Hacia un arancel social

Los países que han proclamado las virtudes del libre comercio y sus principales impulsores han sido Estados Unidos y Gran Bretaña. Como dice Eduardo Galeano en su libro “Las venas abiertas de América Latina”, …la libre competencia en los mercados se convirtió en una verdad revelada para Inglaterra, sólo a partir del momento en que estuvo segura de que era la más fuerte, y después de haber desarrollado su propia industria textil al abrigo de la legislación proteccionista más severa de Europa. .. cuando todavía la industria británica corría con desventaja, el ciudadano inglés al que se sorprendía exportando lana cruda, sin elaborar, era condenado a perder la mano derecha, y si reincidía, lo ahorcaban; estaba prohibido enterrar un cadáver sin que antes el párroco del lugar certificara que el sudario provenía de una fábrica nacional”.


Y Estados Unidos no le iba a la zaga, y en el mismo libro citado podemos leer “En 1865, el general Ulyses Grant, -al poco tiempo Presidente de Estados Unidos- al finalizar la guerra de secesión afirmó: Durante siglos Inglaterra ha confiado en la protección, la ha llevado a cabo hasta sus extremos y ha obtenido de ello resultados satisfactorios. No cabe duda que debe su fuerza presente a este sistema. Después de dos siglos, Inglaterra ha encontrado conveniente adoptar el comercio libre porque piensa que ya la protección no puede ofrecerle nada. …. dentro de doscientos años, cuando América haya obtenido de la protección todo lo que la protección puede ofrecer, adoptará también el libre comercio”

Fieles a esa idea el Consenso de Washington de 1990 requería, entre otras cosas, la liberalización del comercio y del flujo de inversiones extranjeras directas, la desregulación y la privatización. A todo eso se dijo amén y el resultado es (en gran parte) lo que tenemos ahora.

En España no nos hemos preparado cuando había proteccionismo para desarrollar innovación y tecnología propia. Hemos estado más cómodos pidiendo a los extranjeros que nos diesen trabajo (desde fabricantes de automóviles y equipos auxiliares del mismo hasta consultoras, auditoras, empresas de publicidad, etc.) y no hemos pensado que quizá un día estas empresas que nos daban trabajo se podrían ir a otros lugares en los que encontrarían la mano de obra cualificada y los precios que en su día les había dado España.

No vendemos porque, al estar la economía liberalizada y globalizada, nos entran productos de cualquier parte del planeta con unos precios tales que nuestras empresas no pueden competir, teniendo en cuenta los salarios y condiciones sociales que tenemos hasta la fecha.

El pasado mes de julio dio una charla en Pamplona Willy Alfaro de la Organización Mundial del Comercio (OMC) diciendo que las medidas proteccionistas que se están aplicando en algunos países son parches que no solucionan los problemas de fondo. Pero lo que más me impactó de la entrevista publicada en D. N. es cuando a la pregunta “¿Qué hace un trabajador que se queda en paro por la competencia de los países emergentes?” Responde: “La apertura del comercio genera mayor crecimiento, pero también más competitividad, lo cual puede causar cierre de empresas. Esto debe combatirse dando formación a los parados para que encuentren trabajo en otros sectores productivos. Esa es la responsabilidad de los Gobiernos”.

O sea, la política de la OMC origina en gran medida el paro en España, y es el Gobierno español el que se tiene que espabilar para solucionarlo y además tienen la desfachatez de decir que los parados tienen que formarse para encontrar trabajo, como si la mera formación diese ya un puesto de trabajo directamente. No se qué pensarán los cientos o miles de universitarios que se están yendo, se suponen que están formados y si se van es porque a pesar de su formación tampoco encuentran trabajo.

La Banca sin dar crédito (primero salvarse ellos) y la globalización (permitiendo competir en igualdad a países con reglamentaciones desiguales) son dos factores importantísimos que está impidiendo que se creen empresas y, por tanto, puestos de trabajo de cualquier calificación.

¿Y qué podemos hacer?. Pues no digo establecer un nuevo proteccionismo, pues tiene mala prensa, pero sí establecer un “ARANCEL SOCIAL” que trate de ajustar los precios en frontera. Si China, por ejemplo, paga menos S.S., si no hay medidas de depuración o emisión de gases, si la jornada laboral es más elevada que la nuestra, etc. eso hay que corregirlo aplicándole a la entrada en nuestro país ese “ARANCEL SOCIAL”, para que, de esta forma todos compitan con cierta igualdad (la igualdad total es imposible). Esto no es nuevo, pues muchos deportes incluyen un handicap para que puedan competir distintas categorías en igualdad (golf, regatas, etc.).

Soy consciente de la dificultad de adoptar soluciones de este tipo. La presión de las empresas financieras y multinacionales que mueven libremente su capital de un país a otro buscando solamente su rentabilidad, aunque arrasen cualquier país por el que pasen, no lo van a hacer fácil. Pero lo fácil lo hace cualquiera ¿no?



domingo, 5 de agosto de 2012

El alcoholímetro francés: un ejemplo a seguir

Desde el pasado 1 de julio los franceses han descubierto una forma de contribuir al desarrollo de su industria. Concretamente desde esa fecha es obligatorio que todos los vehículos lleven un alcoholímetro para hacer a los conductores el control de alcoholemia cuando la policía lo requiera. Hasta ahora, al menos en España la que llevaba dicho aparato era la policía y lo más que hacía era desechar la boquilla una vez efectuada la prueba, pero el aparato servía indefinidamente. Así pues en Francia están fabricando a todo meter esos artilugios (que deben ser homologados en Francia y que por tanto – y conociendo a los vecinos- serán asimismo fabricados allí, como debe ser). Además, como la mayoría serán desechables, se garantizan una producción constante que a los fabricantes les va a venir de perillas.


Ya que no se nos ha ocurrido a nosotros, al menos podíamos copiar la idea y establecer dicha obligación en nuestro país, pero teniendo en cuenta un pequeño detalle, “que sean homologados y fabricados en España”, pues somos capaces de traerlos de China (porque son más baratos), como hemos hecho con los uniformes del equipo olímpico español (en este caso de Rusia)

Si cada país se apunta a esta idea y teniendo en cuenta los recortes que se hacen por todas partes, la conversación entre la Guardia Civil y el Conductor de un Vehículo al que le vayan a realizar la prueba de alcoholemia podría desarrollarse, en un futuro próximo, de esta manera.



GC. ¡Alto!, policía, control de alcoholemia, aparque el vehículo en el lateral, por favor.

CV. Cómo, ¿policía? si no tiene vd. uniforme ni nada…

GC. Aquí tiene la chapa identificativa. Mire vd. entre uniformes de invierno y verano se disparaba el presupuesto y, tal como están las cosas, han optado por quitarlo. Así que ahora somos todos “de la secreta”.

CV. Bueno, bueno..

GC. Le vamos a hacer la prueba de alcoholemia. Llevará vd. el aparato homologado por España, supongo…

CV. Sí, por supuesto, pero lo tengo en el maletero. A ver, aquí tengo el de Macedonia, Serbia, Montenegro, Bosnia Herzegovina, Croacia, Hungría, Eslovenia, Italia, Mónaco, Francia, Andorra y ….España, aquí está. Es que vengo desde Grecia y los tengo ordenados según la ruta que sigo.

GC. Pues Hungría se le queda al lado…

CV. Sí, pero lo que pasa es que mi suegra vive allí y he tenido que meterme para recogerla. Es la que va en el asiento trasero.

GC. Bueno pues, ya puede soplar.

CV. Fuuuuuu

GC. Jodé se ha pasado 20 pueblos bebiendo

CV. Pero si sólo he tomado dos cervecitas….

GC. Anda que ya se le nota que es griego, echa un olor a Ouzo que tira para atrás. De todas formas le tengo que inmovilizar el vehículo, salvo que su señora tenga carnet

CV. Sí que lo tiene

GC. Bueno pues saque otro alcoholímetro para hacerle a ella la prueba

CV. Es que no tengo más

GC. Pero ¿qué clase de previsión de viaje es la suya?. Si viene de Grecia a España tiene que calcular que pasa por 12 países, multiplicado por 2, para el caso como el de ahora que le salga positivo y haya que hacerle la prueba a un acompañante, nos dan un total de 24 alcoholímetros, y multiplicado por dos (ida y vuelta), le dan un total de 48 aparatos, y yo le añadiría seis más (Francia, Italia y España), pues al hacer mayor recorrido tiene la posibilidad de que le controlen más de una vez. Así pues tendría que llevar 54 alcoholímetros para estar tranquilo.

CV. Pues vaya, tendré que traer un remolque sólo para eso y, además, es una pasta…

GC. No se me ponga chulo y considérese un afortunado, piense en los que vienen de China. De todas formas tengo que ponerle una multa, así que, venga enséñeme su carnet de conducir.

CV. Tenga

GC. ¿Me deja su móvil?, tengo que hacer una llamada a tráfico para ver si está en regla.

CV. Pero vamos, encima le tengo que dejar el móvil para eso?. Además con el roaming me va a costar un montón.

GC. No me llore, por favor, en el gasto que va a hacer en unas vacaciones como las que se va a pegar, ¿qué le representa el importe de esta llamada?, mientras que si todas las llamadas por multas a turistas corren a cargo del Estado español nos cuesta la tira. Es lo que se llama redistribución de la carga impositiva. Además, para su conocimiento, nos han quitado el móvil precisamente por ese motivo, hay que aprovechar la infraestructura de la parte contraria. Vd. como es griego nos comprenderá perfectamente…. Ya sabe nuestra situación.

CV. Bueno, si no hay más remedio…. Pero sea breve por favor…

GC. Vale, su carnet está en vigor, pero tengo que ponerle la multa por no pasar el control de alcoholemia. Supongo que tendrá el talonario de denuncias en español, como es su obligación, ¿no?

CV. Si claro, pero también está en el maletero… a ver si lo pesco…. Si, aquí está…

GC. Y el boli?

CV. Podían poner vds. el boli, tampoco es tanto…

GC. Mire, si no es por no llevar, pero si tiene uno en el coche sólo para las denuncias, le va a durar toda la vida. Sin embargo yo que estoy todo el día dale que te pego, salgo a boli diario, por lo que es más gasto para el Estado.

GC. Bueno, ya está la denuncia cumplimentada, le tengo que inmovilizar el vehículo pues vd. no puede conducir ni su esposa tampoco al no haberle podido hacer la prueba.

CV. Esto es un atropello, no hay derecho, y vds. quieren que vengan turistas…

GC. No me levante la voz, pues le voy a tener que esposar…

CV. Pues haga vd. lo que quiera porque estoy hasta el gorro.

GC. Vale, vd. lo ha querido… supongo que habrá traído las esposas.

CV. Sí, eso, y unas esposas por cada país, ¿no?

GC. No siga por ese camino. Precisamente nuestros políticos después de mucho analizar han llegado a la conclusión que tanto el boli como las esposas pueden servir para todos los países, con lo que le evitan llevar un montón de cosas más

CV. No, si les estoy muy agradecido…

GC. Bueno pues, en plan favor personal, le voy a inmovilizar con unas bridas que utilizamos en vez de las clásicas esposas. Le perdono este fallo, pero le aconsejo se compre unas en la primera ferretería que encuentre.

CV. Y ahora ¿qué hacemos?, no nos va a dejar aquí en medio de la carretera.

GC. Mire, por hacerle un favor y como me quedan un par de servicios por hacer, vamos a ir con su vehículo a realizarlos y luego ya veremos qué hacemos….

CV. Pero cómo, ¿encima tengo que poner yo el coche? ¿Dónde está su coche de policía?

GC. Eso quisiera saber yo, supongo estará en el desguace. Hace ya un año nos quitaron todos los vehículos, pues era una pasta la que se gastaba.

CV. Y cómo se desplazan?

GC. Pues en auto stop y, como en su caso, utilizando el coche del sancionado.

CV. Tenga las llaves y que sea lo que Dios quiera.

………………..

GC. Bueno, ya he terminado el servicio. Ahora me voy para casa y le puedo dejar el coche junto a una comisaría que hay al lado y mañana, cuando se le haya pasado el “mareo” que le hagan otra prueba, le entregarán las llaves y podrá seguir viaje.

CV. Bueno, pues me quedo maravillado de cómo se las han ingeniado en España para reducir costes. A la vuelta a Grecia lo voy a contar para que tomen nota. Pero me queda una duda. ¿Entonces que es lo que llevan vds. encima?

GC. Pues la placa y la pistola

CV. Que inteligentes e imaginativos

GC. Adiós y buen viaje

CV. Adiós

El policía se aleja pensando (….si supiese que la placa y la pistola son de juguete...)